Extender nuestras manos a las mujeres cabeza de hogar es una cuestión de justicia social, equidad de género y construcción de comunidades fuertes y saludables. Al abordar sus necesidades, contribuimos al bienestar general de la sociedad. En la actualidad, es esencial extender nuestras manos a las mujeres cabeza de hogar ya que muchas mujeres cabeza de hogar enfrentan desafíos económicos significativos. Al ofrecerles grupos de apoyo, capacitación laboral y oportunidad de empleo, podemos contribuir al empoderamiento económico de estas mujeres, permitiéndoles mantener a sus familias.
Cuando apoyas a las mujeres cabeza de hogar, también estas contribuyendo al bienestar general de su familias. Al extender nuestras manos a las mujeres cabeza de hogar contribuyes a crear sociedades más equitativas y justas y, contribuyes a romper los ciclos de pobreza que pueden afectar a las generaciones futuras